luni, 2 ianuarie 2012

Feminitatea florii/La feminidad de la flor/Feminitat de la flor (trad. al catalán por Pere Bessó*)

Feminitatea florii 
(pentru Ana Muela Sopeña)

Se impune o terapie ușoară de împrospătare:
doi stropi de apă și o mână trecută peste corolă
în orele de vârf ale zilei sau ale nopții.

De altfel riscă să se disipeze în particule de lumină
sau poate să-și scuture pe neobservate roua
în primele clipe ale dimineții.

Are multe similitudini cu florile firave,
fiindcă se ferește instinctiv de tentațiile atipice,
de nepermis pentru tenul său permiabil.

I se spune pe nume, deși ar prefera să fie anonimă,
iar inima neprihănită ce-i palpită printre petale
abia de menține ritmul evanescent al existenței.

La feminidad de la flor
(para Ana Muela Sopeña)

Se impone una terapia ligera de frescura:
dos gotas de agua y una mano que pasa por la corola
en las horas puntas del día o de la noche.

Si no hay riesgo de disiparse en partículas de luz
o sin querer puede sacudir su rosío
en los primeros momentos de la mañana.

Tiene muchas similitudes con las flores frágiles,
porque se mantiene apartada de las tentaciones atípicas,
inadecuadas para su piel permeable.

La llaman por su nombre, aunque preferiría ser anónima,
y su corazón impoluto que palpita entre los pétalos
apenas mantiene el ritmo evanescente de la existencia.

Feminitat de la flor
(Per Ana Muela Sopeña)

S’imposa una terapia no agresiva de renovació:
Dos esguitons d’aigua i una passada de mà per la corol·la
en les hores punta del dia o de la nit.

Altrament hi ha risc de dissipar-se en partícules de llum
o pot espolsar-se en imperceptible rosada
els primers instants del matí.

Té moltes similituds amb les flors fràgils,
car esquiva instintivament temptacions atípiques,
inconvenients per a la seua pell permeable.

I es diu pel nom, encara que preferiria ser anònima,
i el cor sense taca que li palpita entre pètals
de penes per a mantindre el ritme evanescent de l’existència.

*
La feminidad de la flor o su envés: La flor de la feminidad. Esta transposición es tan antigua como la vida misma hasta tal punto que creo que no hay lengua alguna que no tenga tal metáfora lexicalizada. El erotismo, sin embargo, con que tratas el tema no está exento de esa suave ironía con que la tratas en la primera estrofa. Me refiero a esa terapia suave, no agresiva, de mantenimiento. Dos salpicaduras y una caricia en las horas más intensas.
Genial. Y sigues con la tradición: de lo contrario la flor  -la feminidad- languidece, se aja. Finalmente, cuánta razón tienes, aunque se preferiría anónima, Esa flor tiene todo el registro de voces de amplio espectro.
Por decirlo expresivamente: un puntazo de poema para las horas punta. Tuya es mi primera sonrisa cómplice del día.
Un abrazo.
PereRosa roja

3 comentarii :

  1. Muy hermoso este poema, Andrei.

    Me encanta.

    Un abrazo
    Ana

    RăspundețiȘtergere
  2. ...es un poema que te lo he dedicado a ti, Ana Muela, y por esta razon hago le respectiva inscripción...

    un placer,
    andrei

    RăspundețiȘtergere
  3. El encuentro entre sensibilidades florece y ofrenda su aroma en la percepción de la belleza íntegra, en un poema.
    Ana y Andrei, un abrazo.

    RăspundețiȘtergere